La Prevención en tiempos del Coronavirus

La Prevención del contagio de la enfermedad provocada por el coronavirus, COVID19, debe formar parte ya de las actividades económicas industriales dado que, aunque no se trata de un riesgo exclusivo del entorno laboral, el deber de protección existe conforme a la Ley de Prevención de Riesgos Laborales. Es nuestra responsabilidad, por tanto, proteger e informar a nuestros trabajadores sobre este riesgo, evaluándolo en cada centro de trabajo y adaptando en lo posible la estructura productiva para garantizar que se minimice.

El Instituto de Seguridad y Salud en el Trabajo ha publicado unas Directrices de Buenas Prácticas en el Sector Industrial. Las empresas productoras de acero galvanizado han implantado ya protocolos de trabajo muy estrictos que permiten reducir al mínimo estos riesgos. La práctica totalidad han adaptado su proceso productivo para garantizar la distancia de seguridad de dos metros entre trabajadores. También se han distanciado los turnos, escalonando su entrada e implantado y reforzando las medidas higiénicas, como la desinfección de los materiales y herramientas de trabajo.

Pero los protocolos de trabajo deben también hacerse extensivos a proveedores y clientes, aplicando al personal externo las mismas medidas de higiene y protección que al personal propio. En particular en nuestro sector, son relevantes las operaciones de carga y descarga de materiales, siendo recomendable el uso de los EPIs básicos de protección a los transportistas. Por otro lado, se limita y controla el número de personas que acceden a planta, reduciendo a su vez los flujos de tránsito.

El establecimiento de un canal eficaz de comunicación interna con información veraz sobre la situación epidemiológica de la empresa, así como del área donde está localizada, es también muy relevante. Los trabajadores están permanentemente informados sobre los posibles casos positivos en la plantilla, respetando siempre las normas y criterios de la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) sobre privacidad.

Sin embargo, hay una cuestión pendiente a la que debe prestarse una especial atención y es la necesidad de que las autoridades competentes garanticen el acceso a los EPIs necesarios, así como a pruebas fiables de diagnóstico y detección precoz de la enfermedad.

La industria del galvanizado está fuertemente comprometida con la protección de sus trabajadores, pero las autoridades competentes deben garantizar el acceso a las herramientas de control necesarias, solo así se podrá asegurar un control eficaz de la propagación del virus.